Personal de la Policía Municipal y Protección Civil realizan recorridos de vigilancia por las playas debido a que se encuentran cerradas por la emergencia sanitaria del COVID-19, y este día detectaron a unas 350 personas que se encontraban frente a la zona residencial de Altata, y procedieron a retirarlas.
El Coordinador de Protección Civil, Marco Antonio Juárez Salgueiro, dio a conocer que como parte de las medidas preventivas para evitar la propagación y contagios del coronavirus, en este municipio continúan cerradas las playas, y es por ello que mantienen supervisiones permanentes .
Las personas que fueron retiradas eran familias completas integradas por niños, jóvenes y adultos. Luego de dialogar con ellas, decidieron abandonar la playa de manera voluntaria.
Actualmente está prohibido visitar las playas, porque se pretende bajar las estadísticas de contagios de esta enfermedad, y sólo se logrará mediante un trabajo en conjunto entre el Gobierno y la sociedad.
