Luego de tres días de deliberación, el jurado emitió su veredicto este miércoles: Sean John Combs, conocido artísticamente como ‘Diddy’ Combs, fue declarado culpable del delito de prostitución. Sin embargo, fue absuelto de los cargos más graves relacionados con tráfico sexual y crimen organizado, lo que representa un revés significativo para la Fiscalía de Estados Unidos, que buscaba una condena de cadena perpetua contra el artista.
Con esta resolución, el productor y empresario musical de 55 años enfrenta una sentencia de hasta 10 años de prisión, una condena que podría marcar el fin de su carrera como ejecutivo en la industria del entretenimiento.
El juicio de Combs estuvo en el centro del interés mediático, revelando detalles sensibles sobre los testimonios, pruebas y alegatos presentados por la Fiscalía.
Según el veredicto, el rapero fue hallado culpable de trasladar a través del país a personas —entre ellas trabajadoras sexuales y parejas sentimentales— con el objetivo de mantener relaciones sexuales, una violación grave a la Ley Mann, que prohíbe el transporte interestatal con fines de prostitución u otras actividades sexuales ilegales.
Por su parte, la defensa sostuvo que las mujeres implicadas actuaron por voluntad propia, aunque esa postura no logró invalidar el cargo por el que fue condenado.
En lo que respecta a los cargos más serios, Combs fue absuelto de las acusaciones que lo señalaban de presuntamente utilizar su influencia, recursos económicos y fuerza física para coaccionar a sus parejas a participar en maratones sexuales bajo el efecto de drogas recreativas.