El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, calificó como injustificado y negativo el despido de la guardia de seguridad del Hospital General de Los Mochis, quien reportó al 911 el fallecimiento de un indigente a las afueras del nosocomio el pasado lunes.
El mandatario señaló que las circunstancias del despido deben investigarse, ya que podrían generar malas interpretaciones:
“Si lo retiró su empresa, pero si se lo pidieron para que lo hicieran, está muy mal. En este contexto, se presta a una lectura negativa”, afirmó.
El caso de Lupita: una situación que indigna
La guardia despedida, Lupita, es una mujer de más de 50 años que reside en la colonia Las Canteras junto a su esposo, quien padece Parkinson. Desde hace meses, ella era el único sustento económico de su hogar.
El caso ha generado indignación social, ya que ciudadanos y organizaciones consideran el despido como un acto de represalia injusta por haber cumplido con su deber al reportar una emergencia médica.
Autoridades bajo escrutinio
El gobernador Rocha Moya dejó claro que, si el despido fue solicitado por el hospital o alguna autoridad, sería una acción inadmisible. Mientras tanto, la sociedad civil y grupos defensores de derechos laborales exigen una investigación transparente y, en su caso, la reinstalación de la trabajadora.