Los más de 50 millones de habitantes de Inglaterra regresarán al encierro desde el jueves 5 de noviembre y permanecerán así hasta el 2 de diciembre, así lo anunció el primer ministro británico Boris Johnson.
Todos los comercios no esenciales cerrarán y los ingleses no podrán salir de casa salvo para cuestiones esenciales como comprar comida o acudir al médico. Escuelas y universidades seguirán sin embargo abiertas.
Los 56 millones de habitantes de Inglaterra solo podrán salir de casa para comprar comida, acudir al médico, hacer ejercicio o ir a trabajar si les es imposible hacerlo a distancia, explicó.
