Julio César Chávez Jr., excampeón mundial de peso medio, fue detenido este jueves por el U.S. Marshals Service en Los Ángeles, apenas unos días después de su pelea exhibición contra el youtuber y boxeador Jake Paul en Anaheim, California.
El arresto pone en duda el futuro inmediato del pugilista mexicano, quien buscaba relanzar su carrera tras un prolongado alejamiento de los rings, marcado por escándalos fuera del cuadrilátero.
Las autoridades lo acusan de crimen organizado y tráfico de armas, por lo que será deportado a México en las próximas horas.
El 2 de julio, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) capturó a Chávez Jr., quien se encontraba en Estados Unidos como indocumentado. Actualmente, el boxeador enfrenta un proceso de deportación acelerada.
Según las autoridades, el hijo del legendario Julio César Chávez tiene una orden de arresto vigente en México por su presunta vinculación con el Cártel de Sinaloa, así como por tráfico de armas de fuego, municiones y explosivos.
En un comunicado, el ICE afirmó:
“Bajo la presidencia de Trump, nadie está por encima de la ley, incluidos los atletas de fama mundial. Nuestro mensaje a todos los afiliados a los cárteles en Estados Unidos es claro: los encontraremos y enfrentarán las consecuencias. Se acabaron los días de violencia desenfrenada de los cárteles.”
Considerado en su momento como una de las promesas del boxeo mexicano, Chávez Jr. no logró emular el éxito de su padre, el icónico Julio César Chávez, y su trayectoria ha estado salpicada de irregularidades, suspensiones por sustancias prohibidas y problemas legales.
Hasta ahora, ni su equipo legal ni sus representantes han hecho declaraciones sobre el arresto o el proceso de deportación que enfrenta.
Contexto adicional:
- Su último combate fue una derrota por decisión unánime ante Jake Paul el 29 de junio.
- En México, se le investiga por presuntos lazos con el narcotráfico, aunque él siempre lo ha negado.
- Este arresto podría truncar cualquier intento de regreso al boxeo profesional.