De acuerdo con las cifras oficiales del INEGI este año 2020 en el periodo comprendido de enero a junio la cantidad de solicitudes para incinerar cuerpos subió en más del 70% en comparación con el mismo periodo del 2019.
La pandemia del Covid-19, que hasta el martes 27 de octubre derivó en 84,814 decesos en México, implicó un incremento de la capacidad instalada y personal no sólo en hospitales y centros de gestión médica, también en panteones. De acuerdo con información recopilada por el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), fueron 109 los panteones que tuvieron que aumentar la capacidad instalada y al menos en 29 regiones este aumento de personal fue de forma no remunerada.
A escala nacional se registró un total de 6.1 millones de tumbas, de las cuales se ocupó el 83% y sólo el 17 estuvo disponible. Y en algunos estados, como Acapulco, Campeche, Chilpancingo, Ciudad Victoria y Mexicali la ocupación llegó al 100 por ciento.