Este sábado 31 de diciembre del 2022, a las 9:34 de la mañana falleció el Papa Emérito Benedicto XVI a los 95 años de edad, en su residencia del Vaticano: Monasterio Mater Ecclesiae. La muerte del Papa Emérito se da casi una década después de su renuncia (11 de febrero de 2013). Fue el primer papa en renunciar al cargo en toda la historia.
Ya desde hace varios días, las condiciones de salud del Papa Emérito habían empeorado debido a la edad avanzada, como informó la Oficina de Prensa en sus actualizaciones de la evolución de la situación. El Papa Francisco había pedido a los fieles que rezaran por él.
El primer papa de la historia en renunciar
Nacido bajo el nombre de Joseph Aloisius Ratzinger, el papa y teólogo alemán rompió su silencio pospapal a principios de 2019, al publicar una carta donde expresaba su desacuerdo con la visión de su sucesor sobre los escándalos de abusos sexuales.
El propio Benedicto XVI se vio envuelto en el escándalo después de que en enero de 2022 se investigara cómo la Iglesia había gestionado los casos de abusos sexuales entre 1945 y 2019. Se afirmaba que Benedicto había gestionado mal cuatro casos de abusos sexuales a menores.
Dos semanas después de que se hiciera público el informe, Benedicto reconoció en una carta que se habían producido “abusos y errores” bajo su vigilancia y pidió perdón, pero negó cualquier conducta indebida.
Elegido papa el 19 de abril de 2005, tras la muerte de Juan Pablo II, Benedicto se reunió con las víctimas, algo inédito en un papado.
Un funeral improvisado
Cuando muere un papa, se sigue un protocolo establecido por la Constitución Apostólica, aunque esta vez el Vaticano deberá improvisar ya que se trata de la primera vez en la historia que fallece un papa emérito, sin funciones.
Por lo general, la muerte del papa desencadena la rápida convocatoria de un cónclave, durante el cual los cardenales de todo el mundo se reúnen para eligir a su sucesor. Este protocolo ha sido excluido esta vez, ya que Francisco es papa desde 2013, tras haber sido elegido por la renuncia de Benedicto XVI.
Se trata de la primera vez en la historia moderna que un papa preside el funeral de su predecesor.
Cuando muere un papa, también se destruye su anillo pontificio, un anillo hecho especialmente para cada nuevo papa y que se usa como sello para sus documentos.
En este caso, el anillo de Benedicto XVI fue tachado con una “X” tras su renuncia y quedó inutilizado.
El Vaticano anunció que el cuerpo de Benedicto XVI será expuesto a partir del lunes hasta el miércoles en la basílica de San Pedro, de manera que los fieles de todo el mundo puedan rendirle homenaje.
La ceremonia será “solemne pero sobria”, precisó el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.
Al término del funeral, el féretro del papa emérito será enterrado en las grutas vaticanas, donde se encuentran las tumbas de los papas.